lunes, 31 de agosto de 2015

RECORDANDO A PAUL WALKER

Hola a todos.
La entrada de hoy quiero que sirva para rendir un homenaje al actor Paul Walker.
El próximo 30 de noviembre se cumplen dos años desde su trágica muerte en un accidente de tráfico.
Dejemos a un lado los rumores y las leyendas urbanas que corren sobre su muerte.
Paul nació en Glendale, California, el 12 de septiembre de 1973. Dentro de dos semanas, habría cumplido 42 años.
Sus padres tuvieron cinco hijos. Paul era el segundo de todos ellos.
Era apenas un niño cuando empezó a dar sus primeros pasos en el mundo de la actuación realizando anuncios. Empezó realizando pequeños papeles en series de televisión como Autopista hacia el Cielo, con Michael Landon, y ¿Quién es el jefe?, con Tony Danza y Alyssa Milano, en la década de 1980, y Tocados por un ángel, en la década de 1990.
En 1986, debutó en el cine con una película que mezclaba el terror con la comedia llamada Throb. 
Siguió con papeles secundarios en el cine durante la década de 1990 con películas como Alguien como tú, con Freddie Prinze Jr., The Skulls y Pleasantville. 
Su gran oportunidad le llegó en el año 2001, cuando se convirtió ya para siempre en Brian O' Conner, un policía atípico amante de la velocidad, en la saga de películas The Fast and the Furious. Participó en seis de las siete películas que componen la saga y su personaje quedó para siempre ligado a su persona.
Sin embargo, también tuvo la ocasión de brillar con películas como Banderas de nuestros padres, de Clint Eastwood, poniendo su sello personal a la Segunda Guerra Mundial. Incluso, protagonizó una preciosa película producida por Disney llamada Bajo cero, remake de una película japonesa de 1983, e inspirada en un hecho real.
Mientras rodaba la séptima entrega de The Fast and the Furious, un accidente de tráfico acabó con la vida de Paul.
Guapo, carismático y talentoso, así era este actor que nos dejaba de manera prematura sin haber finalizado su película.
Él murió, pero nos deja como recuerdo sus trabajos. Nos deja al valiente Brian O' Conner. Es fácil empatizar con un personaje fiel a sus ideales y leal a sus amigos.

domingo, 30 de agosto de 2015

BUSHY PARK

Hola a todos.
En muchas de las novelas románticas de época que conocemos que transcurren en Inglaterra, la inmensa mayoría transcurre en Londres y es casi obligatorio que aparezca una escena donde la pareja protagonista o uno de los protagonistas no dé un paseo por Hyde Park.
Hyde Park es el parque más famoso de todo Londres. Sin embargo, no es el único parque que podemos encontrar allí.
Os presento Bushy Park.
Descubrí este lugar mientras investigaba para mi novela Me olvidé de olvidarte. Aparecen en ella otros parques, pero éste me llamó poderosamente la atención.
La existencia de este lugar se remonta hasta la Edad del Bronce, nada menos. Durante el medievo, fue utilizado como campo de cultivo de los campesinos. En el siglo XVI, fue utilizado como coto de caza.
Posee un canal que ordenó construir el Rey Carlos I de unos 19 kilómetros que lleva agua del río Longford tanto a la zona de Hampton Court como a los estanques que hay en el parque.
Un lugar muy carismático del parque es la conocida como Avenida del Castaño, poblada por dichos árboles, y que va desde Park Road hasta la Puerta de los Leones, en Hampton Court. De la misma manera que los japoneses acuden a ver, como en un ritual, los cerezos en flor, era costumbre en el siglo XIX y hasta bien entrado el siglo XX, ir a Bushy Park a ver los castaños en flor.
El parque contiene varios albergues y casas de campo. Está allí el Laboratorio Nacional de Física. También se pueden ver pastando rebaños de gamos y de ciervos con total naturalidad. Se pueden practicar allí toda clase de deportes, como el rugby y el cricket. En los estanques se puede pescar.
Es, en resumen, un lugar precioso que vale la pena descubrir.
En Londres hay mucho más parques, a parte del carismático y famosísimo Hyde Park.

 Foto de Bushy Park, con uno de sus estanques rodeados por sus característicos castaños.

sábado, 22 de agosto de 2015

CONSEJOS VERSIÓN NOVELA ROMÁNTICA DE ÉPOCA

Hola a todos.
La entrada que hago hoy es muy breve.
Una de las cosas que más me ha llamado la atención mientras leía novela romántica histórica son los consejos que le dan a la protagonista. Consejos que tienen que ver con lo que sería su primera vez. Naturalmente, se tienden a los extremos.
La protagonista se convierte en poco menos que una experta después de su primera vez. Donde ve fuegos artificiales por doquier. Todas las escritoras (y los escritores) de novela romántica histórica tendemos a cometer ese fallo. Nos vamos a un extremo.
Pero está el otro extremo. ¿Y quiénes representan ese extremo? Es la madre de la protagonista. Su amiga casada...O una de sus doncellas, que tiene experiencia previa con los hombres.
Lo que dicen es que la primera vez suele ser muy dolorosa. Es cierto que es algo dolorosa, pero no mucho. Se sangra al ser roto el himen. Pero no tanto como uno suele pensar.
Es cierto que no es muy agradable. Pero no es tan asqueroso como lo describen la madre, la doncella experimentada o la amiga casada.
Es cierto que, al menos, en el siglo XIX (y en siglos anteriores) era la única manera que había de tener hijos. Teniendo relaciones sexuales el hombre con la mujer.
Pero el consejo que me mató de la risa fue el que le da la madre de Ana (protagonista de la novela Conquistadora) a su hija para su noche de bodas.
Después de decirle que va a ser una experiencia dolorosa y sangrienta, doña Jesusa (que así se llama la señora) le aconseja a su hija que no piense en nada. Que sea consciente de que sólo así puede quedarse embarazada. Que, por suerte, no dura mucho. En eso, en parte, le doy la razón. Pero que haga algo mientras su marido se desfoga con ella.
¡Que rece el rosario!
Me quedé a cuadros cuando leí esa frase.
Lo sé. He hablado de esta escena en anteriores ocasiones.
Pero ha sido una de las escenas que más me ha impactado. Sospecho que doña Jesusa no ha sido la única madre decimonónica que le ha dado semejante consejo a su hija sobre su noche de bodas.
Y no quiero conocer a más señoras así. Dan cierta grimilla.

  Portada de Conquistadora. Su autora es Esmeralda Santiago. Es una historia que transcurre entre la década de 1830 y la década de 1860 en Puerto Rico. Es una de las novelas más realistas que jamás he leído sobre la vida íntima y amorosa de una dama de buena familia en aquel entonces.

miércoles, 19 de agosto de 2015

UN ALMA ERRANTE

Hola a todos.
El año pasado, pude terminar muchas historias. Una de ellas fue Almas errantes. Sobre esta historia me gustaría hablaros en otra ocasión.
Traté de seguirla después de haberla dejado a medias. Ninguna de las ideas que se me ocurrió me gustó. Hasta que di con la idea que más me gustó.
Pienso subir esas historias a este blog. Son cuentos muy cortitos que transcurren en la Escocia medieval.
Aviso de antemano que no esperéis highlanders porque no los hay. Es más bien una historia un poco paranormal.
Empecemos con el primer cuento que tiene como protagonista a nuestra alma errante Ralph.

UN ALMA ERRANTE

ISLA DE BALTA, EN EL ARCHIPIÉLAGO DE LAS ISLAS SHETLAND, AL NORTE DE ESCOCIA, 1317

-Yo creo que la Muerte no está del todo mal-opinó la joven Blythe-Nadie nos ve. ¿Te has fijado?
                          Blythe y laird Ralph estaban dentro de un broch. Era una fortificación construida con piedra seca. Estaban en la parte superior del broch. Miraban hacia bajo, hacia las personas que entraban y salían de las viviendas que tenían allí. 
                          Ralph era el único hijo de un laird y llevaba muerto varias semanas. Desde que se suicidó cortándose el cuello. 
                          Blythe, en cambio, llevaba muerta más de cinco siglos. 
                          En vida, se había dedicado a saquear cadáveres. Por suerte, la anciana con la que se crió no la obligó a prostituirse, que era lo que Blythe más temía. Tenía una cojera bastante notoria. Complicaciones en el parto de su madre, le explicó la anciana. Murió nada más nacer Blythe. El padre pudo haber sido cualquiera. 
                            Blythe se había convertido en una especie de Guía para Ralph en su nueva condición de espíritu. No podía subir al Cielo porque su tiempo en La Tierra no había sido agotado. Él había tomado la decisión de suicidarse. 
-Le usurpaste a Dios el lugar que a Él le corresponde-le explicó Blythe-Sólo Dios nos da la vida. Y sólo Dios es quién decide cuándo hemos de morir. Has cometido blasfemia. 
-¡Me he cortado el cuello!-protestó Ralph. 
-Has dejado a tu familia destrozada. 
-Preferiría no tener que hablar de mi familia. Sospecho que conoces la historia de mis padres mejor que yo. 
-Estoy muerta y puedo verlo todo. Es imposible aburrirse. 
                          Salieron del broch sin ser vistos. Para Blythe, era una de las mejores ventajas de ser un fantasma. Así era cómo les llamaban. Nadie podía verles. En cambio, la gente sí podía sentirles. 
                           Blythe ya no sentía hambre cuando, al pasar por delante de la ventana de alguna casa, veía a una mujer preparar sopa de marisco. Que también era conocida como partan bree. Su estómago ya no rugía cuando veía cómo el arroz que se empleaba para preparar aquella sopa se iba cociendo en la lumbre.
-Todo el mundo vive dentro del broch-comentó Ralph-Y viven ajenos a nosotros.
-Los dos somos de otros lugares-observó Blythe.
                            Ella tenía un fuerte acento inglés. Vagando, había llegado hasta tierras escocesas. Fue una infección pulmonar la que acabó con su vida.
                              Ralph todavía recordaba la noche en la que, a los pocos días de morir, se despertó y vio a Blythe encima de él.
                                Besándole con tanta pasión que Ralph llegó a creer que estaba con una ramera.
                             Lo cierto era que Blythe había muerto virgen. Le confesó a Ralph que se había enamorado perdidamente de un apuesto soldado al que socorrió cuando estaba malherido tras una escaramuza. Él le agradeció todos los cuidados que le había brindado. 
-¿Ocurrió algo entre vosotros?-quiso saber Ralph-No es de mi incumbencia.
                         No ocurrió nada entre ellos. Blythe maldijo mentalmente su cojera.
                         Ralph reaccionó como un hombre. A pesar de que estaba muerto.
                         La acarició. La tuvo entre sus brazos.
                         La hizo gozar.
-Te vi solo cuando te encontré durmiendo-contestó Blythe-Y me acerqué a ti porque quería saber qué ocurría entre un hombre y una mujer. Hasta ese momento...Yo había muerto virgen.
                         Los muertos no se ruborizan, pensó Blythe. Sin embargo, ella sí se ruborizó. ¿Acaso podían ruborizarse los muertos?
                          Recordaba la lengua ansiosa de Ralph recorriendo su cuerpo.
                          Se estremeció con el recuerdo. Trató de borrarlo de su mente.
                          Caminaron en silencio durante unos instantes. Los muertos también recuerdan, pensó Blythe. Y, a su vez, sus espíritus se llenan de recuerdos. Aquel hombre del que se enamoró parecía estar más enamorado de sí mismo. Contrajo matrimonio con la hermana menor de un señor feudal. Estaba considerada como la mujer más hermosa de toda Inglaterra. Cuando Blythe se enteró, sintió el deseo inmenso de morir.
                           A los pocos días de morir Blythe, oyó decir que había muerto de pena. Había dejado de comer. Sólo lloraba. Se iba marchitando poco a poco.
                            Después de muerta, Blythe tuvo la ocasión de conocer mejor a aquel hombre al que tanto había amado, a pesar de que no llegó a conocerle mucho. Sólo estuvo viviendo en su casa (una especie de choza, más bien) durante dos semanas. La trató a la anciana con la que vivía y a ella misma como a sus criadas. Sin embargo, Blythe estaba subyagada por su enorme belleza. La anciana con la que vivía llegó a decir que su corazón estaba vacío por dentro.
                          Tenía razón. No había nada dentro de aquel hombre. Era cruel con sus hombres. Fue cruel con su propia esposa. Por suerte, no llegaron a tener hijos. Enloqueció cuando se dio cuenta de que se estaba haciendo viejo. No soportaba perder su gran belleza física. Todas las mujeres le adoraban. Engañó a su mujer con casi todas las doncellas que había a su servicio. Cuando su esposa se fugó con otro hombre, lo consideró un gran insulto. ¿Cómo podía ella abandonarle por otro hombre cuando no existía hombre más hermoso que él en todo el país?
                          Blythe y Ralph contemplaron las olas.
                          Se levantaban ante ellos.
                          Parecían inmensas. Grandes...
                          Se acercaron a uno de los acantilados que hay en la isla.
                          Contemplaron, a lo lejos, las barcas de pescadores que estaban faenando. Volverían a la isla en cuestión de unos instantes. Ya estaba empezando a anochecer.
                           La capilla dedicada a San Sunniva estaba cerrada. Ralph y Blythe habían entrado allí varias veces durante la Misa de doce. Se colocaban detrás del último banco. Blythe permanecía seria durante toda la ceremonia. En realidad, era tan seria como lo era el propio Ralph.
-¿Supiste algo de ese hombre?-le preguntó el joven a Blythe.
-Sé muchas cosas sobre él-respondió la joven-Como espíritu, le vi enloquecer tras ser abandonado por su esposa. Las mujeres que le adoraban antaño huían de él. Vieron su verdadera naturaleza. Su familia le tenía muy consentido.
-¿Por qué lo dices?
-Sus padres y sus hermanos le reían la gracia porque era el heredero. El hijo mayor...Todos le obedecían ciegamente.



-¿Dónde está ahora?
-Murió asesinado por su cuñado cuando éste le desafió su autoridad. Los dos eran igual de arrogantes y de violentos. Está en el Purgatorio.
-Pero tu muerte fue natural.
-En teoría, por lo que he escuchado, una infección pulmonar me trajo hasta aquí. Pero hay quién no lo cree. Dicen que dejarse morir es como suicidarse. Yo también he cometido blasfemia. Al dejarme morir, me suicidé. Le robé a Dios ese don. Me dio la vida. Yo debía de vivir más años de los que viví.
-Yo me suicidé porque sentía que no era un digno hijo de mi padre. Soy débil y mi padre es fuerte y valiente. Yo, en cambio, soy un cobarde.
                           Se dirigieron a un lugar llamado Muckle Head. Era su lugar favorito desde que llegaron a la isla. ¿Cuánto tiempo había transcurrido desde que llegaron a Balta? Apenas habían transcurrido unos días. Sin embargo, se sentían muy unidos a aquel lugar.
-¿Qué será de nosotros?-le preguntó Ralph a Blythe.
                         Ella se encogió de hombros. De pronto, se sintió muy vieja. Llevaba sobre sus hombros el peso de llevar cinco siglos vagando de un lado a otro. De ser un espíritu que caminaba errante sobre el mundo de los vivos.
                         No sabía cómo dejar de ser un espíritu errante. Tan sólo quería descansar en paz.
                        Su familia debía de rezar por ella. Pero, ¿qué familia tenía Blythe en La Tierra? Había muerto virgen. Luego, nunca se había casado. Nunca había tenido hijos. Sólo había tenido a aquella anciana que la crió. Su madre había muerto al poco de nacer ella. Era hija única. De haber sabido quién fue su padre, habría intentado averiguar si éste había tenido descendientes.
                        Estaba sola. Ralph y ella se miraron. También él estaba solo.
                        Tampoco sabía quién le engendró. Cuando era un adolescente, supo que el laird a quién llamaba padre no era su verdadero padre.
                          Era como Blythe. Por eso, se sentía tan unido a ella. En realidad, no se había sentido nunca antes tan unido a alguien. La Muerte le había permitido conocerla.
-Eres especial-le aseguró.
                          Blythe esbozó una sonrisa. Los muertos también sonríen, pensó.
                         En realidad, los muertos no se diferenciaban tanto de los vivos. Sus cuerpos eran los que estaban muertos. Pero sus espíritus eran los que estaban vivos. Podían sentir toda clase de emociones.



-Te amo-le dijo a Ralph-No sé cómo ha ocurrido. Pero te amo.
-¿Cómo dices?-se sorprendió el joven.
-Me has escuchado. Eres mi compañero para la Eternidad, Ralph. Aunque no te hayas dado cuenta de ello.
-Blythe...
 -Por eso, estamos juntos en nuestro eterno errar de un lado a otro. Somos almas errantes. Y hemos de vagar juntos consolándonos el uno al otro. Amándonos.
-Yo...
                                 Ralph supo que Blythe tenía razón. Cuando estaba vivo, su familia había hablado de casarle. Sin embargo, ninguna mujer había despertado su interés. Lo cierto era que nunca había estado con ninguna mujer. Hasta que conoció a Blythe y despertó a un mundo nuevo con ella. Había descubierto los placeres de la carne con ella. A pesar de que estaban ambos muertos.
-Yo también te amo, Blythe-se sorprendió así mismo admitiendo-Te amo.
                                 Los dos intercambiaron una mirada llena de ternura. No se trataba de puro deseo. Se trataba de algo mucho más fuerte de lo que jamás habían pensado.
                                 No era ninguna ensoñación para Blythe, cómo sí lo había sido su alocado amor por aquel hombre. Era algo real.
                                  Tan real como estar en aquel lugar mirando al mar.
                                  Ralph se acercó a Blythe.
                                   La besó en los labios con mucha ternura.
                                   Dos seres incorpóreos, Ralph y Blythe, yacieron sobre la hierba que crece en Muckle Head aquella noche.
                                   Se lamieron el uno a la otra. Saboreaban la piel de la persona amada. Se querían saciar de ella. Porque sentían que había realmente piel en el espíritu de la persona amada.
                                    Eternamente amada...
                                    Caía la noche. Ellos se fundían en un solo ser. No se trataba sólo de algo carnal. Era la unión de dos almas que estaban destinadas a encontrarse. Llevo cinco siglos esperándote, pensó Blythe con arrobo.
                                     Se sintió la mujer más feliz del mundo al ser estrechada por aquellos brazos.
                                    Ralph no se cansaba de lamer a Blythe. De morderla. De chupar sus pechos. De acariciarla con las manos. De acariciarla con los labios. De besarla con pasión hasta quedar saciado de ella.
                                     De sentir que todo lo que estaba ocurriendo era algo real. Auténtico...

FIN

martes, 18 de agosto de 2015

NOMBRES DE HEROÍNA DE NOVELA ROMÁNTICA

Hola a todos.
Hacía tiempo que quería hacer esta entrada en este blog.
Se trata sobre los nombres que tienen las protagonistas de novela romántica que tanto nos gusta leer.
La idea surgió hace algún tiempo.
Romantic Ediciones publicó la novela de Elizabeth Bowman Magia en las estrellas. La protagonista de esta novela se llama, precisamente, Estrella. Es un nombre precioso.
A mí siempre me ha gustado el nombre de Estrella. Y sus derivados...Estelle...Vanessa...Hester...
Sí, Vanessa también puede significar estrella. Era la manera cariñosa con la que el escritor Jonathan Swift se refería a su amante Stella.
El caso es que me di cuenta de que era la primera vez que leía una novela en la que la protagonista se llama Estrella. Nunca antes se ha escrito una novela en la que la protagonista se llame así. Al menos, no en romántica histórica. Y, al menos, no que yo haya leído.
Por ese motivo, decidí que valía la pena averiguar los nombres que más usan las escritoras en novela romántica.
Hay autoras que utilizan nombres raros. Bárbara Cartland no usa nombres muy convencionales para sus heroínas. Tenemos a una Bertilla (juro que se llama así la chica). Tenemos a una Orlina. Tenemos a una Titania. En varias ocasiones, la chica en cuestión se llama Gisele. Tenemos a una Hermia. Y la lista sigue.
Otra autora que no suele utilizar nombres convencionales es la añorada Kathleen Woodiwiss. Tenemos a una Aislinn (así se llamaba la protagonista de El lobo y la paloma). Tenemos a una Raelynn (protagonizó dos cuentos suyos y una novela). Tenemos a una Shemaine. Y la lista continúa.
Sin embargo, son dos curiosas excepciones.
He elaborado una lista con los nombres que más se usan en novela romántica. Es una lista bastante larga. Abarca todos mis recuerdos. Y lo que he investigado.
Voy a ceñirme sólo a las novelas románticas históricas. Y pondré algunos ejemplos.
1-Victoria. Me parece que éste es uno de los nombres que más se utiliza. Y aquí tenemos a una Victoria muy patria. Se la conoce también como Lluvia. Es la protagonista de Lluvia sobre el corazón, de Yolanda Quiralte.
2-Augusta. He leído dos novelas en la que la protagonista se llama Augusta. Por ejemplo, la protagonista de Cita de amor se llama Augusta.
3-Elizabeth. Se han usado sus diminutivos. Lizzie...Beth...Liza...
4-Mary. Otro nombre que se utiliza mucho en novela romántica histórica.
5-Anne. También se puede usar Anna. O Ann (así se llamaba la protagonista de Reflejo de Luna). O Annie...
6-Katherine. Ante nosotros, se abre todo un abanico de posibilidades. Hay muchos diminutivos de este nombre. Tenemos a Kate (protagonista de El vizconde que me amó). Tenemos a Kathryn. Tenemos también a Kathleen. Tenemos también a Katie. Tenemos también a Cat. Tenemos también a Cathy.
7-Storm. De acuerdo, es un nombre que apenas se ha usado en novela romántica. Pero Rebecca Brandewyne llamó así a la protagonista de su novela Amor, acaríciame. 
8-Alexandra. También se utiliza su diminutivo Alex. Y, sin ir más lejos, tenemos a numerosas Alexandras en novela romántica. Alexandra se llama la protagonista de Tormenta de amores. 
9-Jocelyn. Sólo he leído dos o tres novelas románticas históricas en la que la protagonista se llama así.
10-Emma. Otro nombre muy usado en novela romántica de época...Se llama así la protagonista de El beso maldito. 
11-Claudia. Se ha usado en contadas ocasiones. De hecho, sólo recuerdo una novela en la que la protagonista se llame así. Se trata de El seductor seducido, de Julia London.
12-Edwina. ¿Alguien ha leído una novela en la que la protagonista se llame así? Yo sólo conozco a una Edwina. De momento, al menos, hasta que Julia Quinn se anime a contarnos la historia de Edwina Sheffield. Yo sigo esperando esa historia. Se trata de la protagonista de una novela de Ebony Clark. Se titula Fugitiva. 
13-Hermione. Todos conocemos a Hermione Granger. Pero...¿Habéis leído alguna novela romántica en la que la protagonista se llame así?
14-Lily. Y tenemos una larga lista de protagonistas que se llaman así. O, al menos, usan las variantes de este nombre. Lilith, de Una primavera para pecar. Lilian Bowman, de Sucedió en otoño. Y la lista es infinita.
15-Sophie. También puede ser Sophia. Es otro de los nombres más usados en este género. Tenemos a unas cuantas heroínas de novela romántica de época que se llaman así. El amante de lady Sophia...Y la bondadosa Sophie de El amante secreto. 
16-Christine. Es un nombre muy bonito. La pena es que no es de los más usados en este género.
17-Lauren. O Laura...He encontrado a varias tocayas mías en novela romántica histórica.
18-Olivia. Es otro de los nombres más usados en novela romántica de época. Tenemos a la protagonista de Un lugar para Connor. 
19-Cassandra. Posiblemente, otro de los nombres más usados en novela romántica histórica. Y tenemos a Cassandra, la protagonista de la novela de Miranda Kellaway Ecos del Destino. 
20-Alice. Otro nombre que no es muy usado en novela romántica.
Y aquí termina mi lista de nombres que se utilizan en novela romántica. He puesto también los nombres que menos aparecen.
Y aquí va mi lista de mis nombres favoritos:
1-Claudia.
2-Estelle.
3-Alice.
4-Edwina.
5-Hermione.
No están todos los que me habría gustado nombrar. Pero, al menos, aparecen unos cuantos.

 Portada de Magia en las estrellas, la responsable indirecta de este post.

Más bien, la responsable indirecta es Estrella. Estrella y la primera vez que una chica se llama así en novela romántica.

lunes, 17 de agosto de 2015

LA MIRADA DE DEMI MOORE

Hola a todos.
Últimamente, hablo mucho de famosos en este blog. No pienso convertirlo en un blog de cotilleos. Sin embargo, me gustaría hablaros hoy de la actriz Demi Moore.
Todos hemos visto alguna de sus películas alguna vez. Reconozco que mi película favorita de ella es Ghost. ¡Se sale en ella!
No vengo aquí para hablar de sus películas. Ni para hablar de sus romances. Vengo para hablaros de sus ojos.
Demi está considerada como una de las actrices más hermosas de todo el mundo. Junto con Michelle Pfeiffer, posee la mirada más cautivadora del planeta.
Sin embargo, lo más curioso es que Demi siempre ha odiado sus ojos. Desde pequeña, sus ojos la han acomplejado.
El estrabismo consiste en la alineación de un ojo en relación con el otro. No miran los dos ojos al mismo sitio. Uno parece mirar en otro lado que el otro.
Demi padeció estrabismo en la niñez. Lo pasó muy mal a raíz de ello. Fue víctima de toda clase de burlas por parte de otros niños. Es curioso como los niños, a pesar de que son inocentes, pueden llegar a ser tan crueles con otros niños. Cómo pueden burlarse de los que parecen diferentes a ellos.
Usó gafas durante la mayor parte de su adolescencia. En la actualidad, usa lentillas. Pero, si uno se fija bien, se percibe algo en su mirada.
No obstante, es ese algo que se percibe en su mirada lo que la ha hecho única. Lo que la ha convertido en la dueña de una mirada cargada de misterio.
Decidió compartir su historia en su día. Dar aliento a los que sufren estrabismo.

 

La actriz Demi Moore.

Existe una operación que cura el estrabismo. También el uso de lentillas y de gafas ayuda a disminuir los estragos que causa.
Se pasa mal a nivel físico. Pero se sufre aún más a nivel psicológico. Sé, por experiencia, lo cruel que puede llegar a ser una burla. Hace más daño que un golpe. En realidad, golpe y burla hacen el mismo daño. Sobre todo, cuando uno es pequeño.
Te marca la personalidad. Demi fue operada en varias ocasiones de la vista.
En la actualidad, está sufriendo la lacra de Hollywood. Si eres una actriz mayor de cuarenta años, no te contratan. Meryl Streep es, junto con Diane Keaton, la que está escapando de ese machismo reinante en la Meca del Cine. Se rieron de Demi porque su marido Ashton Kutcher la dejó por otra mujer.
Me pregunto lo que habría pasado si ella le hubiese dejado por otro hombre. Me acuerdo de Meg Ryan. Y le habrían hecho la cruz, como le hicieron a ella.
Sobre el machismo reinante en Hollywood hablaré otro día. Demi ha demostrado ser bella por dentro y por fuera. Sabe salir bien a flote. Y está demostrando que las burlas hace ya rato que dejaron de importarle.
Está por encima de todo eso.

sábado, 15 de agosto de 2015

FAMOSOS QUE CONVIVEN CON LA DIABETES

Hola a todos.
Ayer, un rato después de hacer mi entrada en este blog, me vine abajo.
De pronto, lo vi todo negro y sentía que no tenía salida. Hoy, me siento un poco mejor.
Tuve el apoyo de varias personas maravillosas que me dieron unos consejos muy buenos.
No estoy del todo bien. Pero he de tirar para adelante.
No sé lo que me pasa en estos meses. Siento que no puedo con todo. Sigo escribiendo. Pero ayer...Me derrumbé.
Ya estoy un poco mejor y quiero hacer una entrada en este blog.
Hoy, me gustaría hablaros un poco acerca de la diabetes. Mi padre es diabético. En mi familia, hay antecedentes por diabetes.
Tanto mi abuelo materno como mi abuela paterna eran diabéticos. Mi padre se enteró el mismo Día de Reyes de hace tres años.
Se mareó y en el Centro de Salud de La Unión le dijeron que tenía un infarto. Le llevaron a Urgencias del Hospital de Santa Lucía. Tras hacerle varias pruebas, descartaron que tuviera un infarto. Tenía 5 gramos de azúcar.
Estuvo diez días ingresado en el hospital. La diabetes que tiene es de tipo 2. Tiene que hacer mucho ejercicio. Hacer dieta. Y, sobre todo, estar tranquilo. No debe de alterarse.
La diabetes es una enfermedad que consiste en que hay un alto índice de glucosa en la sangre. La diabetes suele ser una enfermedad hereditaria. Mi padre la heredó de mi abuela. Mi madre desconoce si puede ser diabética. Y yo, de momento, no soy diabética tras haberme hecho un análisis de sangre no hace ni un año.
Existen dos tipos de diabetes:
-La diabetes de tipo 1: Consiste en la destrucción de las células beta. Son las células que están en el páncreas. Sintetizan y segregan la insulina. El ser humano es capaz de producir su propia insulina. De este modo, puede controlar el nivel de glucosa que tiene en su sangre. En este tipo de diabetes, es el sistema inmunológico el que destruye las células. Sin estas células, el páncreas es incapaz de producir por sí solo y los niveles de glucosa van en aumento.
-La diabetes de tipo 2: El cuerpo sí produce insulina por sí solo. Sin embargo, no produce la suficiente insulina que debería de producir.
En el caso de la diabetes de tipo 2, la sufren las personas mayores de 40 años. También las sufren personas que padecen obesidad o que no realizan ningún tipo de ejercicio. En este caso, la insulina que se produce no es bien aprovechada. No se reparte por todo el organismo.
Hay famosos que son diabéticos.
Tom Hanks es uno de ellos. En su caso, se enteró de que era diabético cuando tenía dieciséis años. Padece la diabetes de tipo 2.
Anne Rice. La creadora del genial vampiro Lestat, protagonista de su trilogía vampírica, también es diabética.
Salma Hayek también padece esta patología.
Nick Jonas es uno de los casos más conocidos. En la época en la que los Jonas Brothers eran el fenómeno fan que fue (hace unos seis o siete años), Disney Channel emitió una entrevista al grupo. Era raro no ver a los tres hermanos Jonas a todas horas del día. Disney Channel los explotó.
En este caso, Nick Jonas habló largo y tendido acerca de su enfermedad.
En la diabetes de tipo 1, el paciente debe de inyectarse insulina varias veces al día (no recuerdo cuántas). Tom Hanks no debe de inyectarse insulina debido al tipo de diabetes que padece. Es el caso contrario a Nick Jonas.
Él padece la diabetes de tipo 1. Hablaba de sus pinchazos de insulina. Lo pasaba realmente mal.
Todos estos famosos tienen varias cosas en común. No tuvieron reparos en hablar de su dolencia. En contar su experiencia. En su opinión, estaban ayudando a otros con su problema. Es curioso.
La gente se siente consolada cuando un famoso tiene el mismo problema que les aqueja a ellos. Es el caso de Tom Cruise, que es disléxico.
O de Demi Moore, quién tiene una enfermedad en la vista. Ello no les ha supuesto problema alguno a la hora de triunfar.
Woody Allen habló con cierto sentido del humor acerca de su diabetes. Fue cuando recogió el Premio Príncipe de Asturias en el año 2002.



"No merezco este premio, pero tengo diabetes y tampoco la merezco".

viernes, 14 de agosto de 2015

LOS TEST DE FACEBOOK

Hola a todos. 
Últimamente, me he picado en los test de Facebook. 
Son test en los que tú introduces tu nombre y te dicen de todo. La noticia por la que te harás famoso, el escándalo que vas a protagonizar, con quién te casarás. Y la lista es interminable. 
A mí me ha salido que mi marido ideal sería Christian Grey. Respeto a sus admiradoras, pero el señor Grey es la clase de hombre del que me mantendría alejada a 1.000 kilómetros mínimo. 
También he hecho un test sobre cuánto tiempo duraría viva en una película de terror. ¡Y resulta que llegaré viva hasta que el héroe me mate porque soy la asesina! ¡Alucinante!
También me han dicho que sería una buena compañera de farra de Paris Hilton. A pesar de que yo ni bebo ni fumo ni me drogo. Ni lo he hecho antes y no creo que vaya a empezar ahora a hacerlo. 
Y éste es el último test que he hecho sobre cuál sería mi himno. 


Para echarse unas risas y pasar un buen rato, os invito a que hagáis estos test en este link:

http://es.nametests.com/



jueves, 13 de agosto de 2015

COMO A UNA PERSONA

Hola a todos.
Nunca he tenido perro. Sin embargo, en la calle donde yo vivía antes, varios de mis vecinos tenían un perro como mascota.
Esta noche, me he acordado de una vecina mía. Por respeto, no diré su nombre. Sin embargo, me gustaría contaros su historia.
Mi vecina se compró un perro hace muchos años. Lo llamó Jorge. 
Era una mujer de unos cincuenta o sesenta años.
Estaba casada y tenía hijos. No tardó mucho tiempo en tener los primeros nietos.
Sin embargo, lo que sentía por Jorge era verdadera adoración. Lo sentaba con ella a ver la tele. Le daba de comer lo que ella comía. Hablaba con él con tanto cariño que uno pensaba que estaba hablando con un niño pequeño. Siempre estaba con él en brazos.
Le hacía carantoñas. Jorge no era sólo su mascota. Era como un miembro más de su familia. Como un hijo...Todo el mundo en su familia le quería. Incluso, su marido.
Éste se jubiló al cabo de un tiempo. Empezó a visitar el Hogar del Pensionista, que es un lugar donde las personas mayores de La Unión van a jugar al dominó o a las cartas y donde se celebran bailes todos los viernes. Jorge entendió a qué hora iba volviendo a casa. Y salía a esperarle al balcón.
¡Qué contento se ponía cuando le veía llegar! Ladraba de puro gozo. Lo recuerdo como un perro de color blanco. Muy alegre...
Hace veinte años, un coche atropelló a Jorge. El matrimonio se había ido de veraneo con él. No recuerdo adónde exactamente. Un día, un coche le atropelló. El pobrecillo de Jorge murió. Y mi vecina quedó destrozada.
Jorge había sido su compañía cuando estaba sola. Había volcado todo su cariño en él. Entiendo ahora el porqué a los animales se les quiere como a miembros de la familia. ¡Son miembros de la familia! Nos hacen compañía cuando estamos solos.
Incluso, les contamos nuestras penas. De algún modo, nos hacen reír. Y nos miran con comprensión.
Eso debió de representa Jorge para mi vecina. Compañía...Alegría...Amor...

 No tengo ninguna foto de Jorge. Se me da mal hacer fotos. Sin embargo, he encontrado esta foto en Internet. Creo que el perro que aparece en la foto se parece a Jorge. Son de aspecto adorable. Y eran blancos como la leche. No es Jorge. Pero os podéis hacer una idea aproximada de cómo podía ser.

miércoles, 12 de agosto de 2015

LA ISLA DE STURGE

Hola a todos.
Ya que no creo que me vaya a ir de veraneo a estas alturas del verano, me he animado a enseñaros a partir de ahora fotos de lugares para muchos de vosotros desconocidos.
Vamos a empezar haciendo un viaje bastante largo por nuestro helado y fascinante sexto continente, La Antártida.
Os presento una de sus islas, la isla de Sturge.
La isla de Sturge es una isla deshabitada que se encuentra en el Océano Antártico, a 95 kilómetros al noreste del Cabo Belousov.
Tiene forma de paralelogramo. Su lado occidental es mucho más largo que su lado oriental yendo hacia el sur, que tiene las costas más pequeñas. Tiene una longitud de 12 kilómetros y tiene tan sólo dos cabos. El cabo Smyth, que se encuentra en el sur de la isla, y el cabo Freeman, que se encuentra en el norte.
El Pico Brown es el lugar más elevado de la isla, que mide 1.500 metros, pero es completa inaccesible.
Es el pico más elevado del archipiélago al que pertenece la isla, el archipiélago de las islas Balleny.
Pese a que Nueva Zelanda reclama la isla, ésta forma parte del Tratado Antártico, un acuerdo internacional que regula la actividad de los países de los distintos continente sobre la Antártida.

  En este dibujo aparece la localización de la isla de Sturge en el continente antártico. Aparece rodeada por un círculo rojo.

martes, 11 de agosto de 2015

"EL VELO PINTADO", DE WILLIAM SOMERSET

Hola a todos.
Hoy, os traigo una crítica literaria. Ha pasado mucho tiempo desde que hice aquí la última crítica literaria. Y no quiero perder esa buena costumbre de hablar de libros.
La novela de la que quiero hablaros se llama El velo pintado. 
La leí en la biblioteca de mi ciudad hace algún tiempo. Y la he vuelto a releer antes del inicio del verano.
Todos habéis oído hablar de la película protagonizada por Naomi Watts hace algún tiempo. Hubo una versión que protagonizó en la década de 1930 la mismísima Greta Garbo.
Cuenta la historia de Kitty, una joven de buena familia que vive en el Londres de 1920. Kitty está entrando en una edad en la que se podría considerar una solterona. Por ese motivo, se casa con Walter, médico bacteriólogo. Con él, se va a vivir a Hong Kong. El matrimonio es un fracaso. Kitty es una joven que vive más pendiente de divertirse y Walter está consagrado a su trabajo. A raíz de esto, Kitty se enamora de un joven vividor llamado Charlie con el que vive un romance a espaldas de su marido hasta que éste se entera. Abandonada por Charlie e incapaz de conseguir que Walter la perdone, Kitty se ve obligada a ir con él hasta una región de China que está infectada por el cólera. Kitty se vuelca en ayudar a los más desfavorecidos y, poco a poco, se va enamorando sinceramente de Walter.
Está considerada como una de las primeras novelas de land-escape. 
Cuenta la historia de una joven que viaja hasta un lugar exótico por diversos motivos y acaba encontrándose así misma.
La novela nos desgrana el interior de Kitty. Ha sido educada por su adinerada familia para hacer una buena boda, pero, a punto de cumplir veinticinco años, piensa que se va a quedar soltera y acepta casarse con Walter, al que casi no conoce. Kitty es una hija de su tiempo. Es guapa, rica y un tanto frívola que sólo quiere divertirse. No le agrada nada acompañar a su marido a Hong Kong. Su supuesto amor por Charlie es, en realidad, pura diversión. Una forma de no aburrirse en la colonia inglesa de la ciudad y una válvula de escape para su matrimonio fallido. Kitty no se permite el lujo de intentar conocer a Walter. Sin embargo, él sí quiere de verdad a su mujer y no entiende el porqué Kitty puede ser tan fría con él. Por ese motivo, se siente dolido cuando se entera de que su mujer es la amante de otro hombre. Se la lleva consigo para que la ayude en una región devastada por el cólera. No sólo lo hace para separarla de Charlie y como castigo a su adulterio, sino también para que tome conciencia de que no todo en la vida es diversión.
En ese entorno, Kitty se descubre así misma. Pasa de ser una mujer frívola y superficial a ser una mujer abnegada que lucha por ayudar a los demás. Siente compasión hacia los enfermos y trata de ayudar en la medida de lo posible. Gracias a ese trabajo, descubre lo diferentes que son Charlie y Walter.
El primero es el típico crápula que va de cama en cama sin importarle los sentimientos de los demás. El otro es fiel y entregado a su trabajo que quiere realmente a Kitty. Este descubrimiento hará que ella se enamore sinceramente de él y luche por conseguir su perdón.
Se describe cómo era la vida en la colonia inglesa en Hong Kong, donde los ricos sólo parecen querer divertirse. En claro contraste, está la vida en el dispensario adonde irán a parar Walter y Kitty. Donde la gente lucha por sobrevivir y donde hay también gente que quiere ayudar a los enfermos a vivir y a paliar su sufrimiento.
De un mundo vacío y falso a un mundo donde existe una razón para vivir y para luchar.
No es sólo una novela romántica. Es una novela de sentimientos, del viaje de una mujer hacia su descubrimiento personal. De cómo nunca es tarde para madurar y dónde el perdón se convierte en un bálsamo ante tanto dolor. Dónde puede surgir el amor en los lugares más infernales.
Un libro altamente recomendable. Os lo recomiendo de corazón.

NOTA: 8,5

 Portada de la edición antigua de El velo pintado. 

domingo, 9 de agosto de 2015

¡ME ENCANTAN LOS GATOS!

Hola a todos.
La entrada de hoy es sobre un tema que resulta demasiado obvio. ¡Adoro a los gatos! No tengo gatos porque mi padre siente odio hacia ese animal. No sé porqué. ¡Manías de él!
Sin embargo, siempre he sentido un gran cariño hacia los gatos. En mi calle, había muchos gatos. A los más pequeños, los metíamos en cajas de cartón. Le dábamos leche. Les tapábamos con trapos cuando hacía frío. Incluso, les poníamos nombre. Pero esos gatos crecían y acababan marchándose. Cuando era pequeña, sentía más afinidad hacia Silvestre que hacia Piolín. ¡Y eso que tengo cuatro canarios de mascota!
Uno de mis músicos favoritos es Peter Criss, el batería del grupo de rock Kiss. Peter se pinta la cara como un gato. Se considera así mismo como El Hombre Gato. Algo felino sí que tiene. Puede que sea la expresión de su cara. O su mirada...Tiene una voz preciosa. Y sabe cómo tocar muy bien la batería.
No soporto a Jerry. En cambio, sí me cae bien Tom. Mi cuento favorito cuando era pequeña era El Gato con Botas. El hijo pequeño de un molinero hereda a la muerte de su padre un gato que resulta ser muy inteligente y astuto.
El gato tiene miedo de que el hijo pequeño del molinero acabe comiéndoselo. De hecho, el chico se lamenta de su mala suerte diciendo que su única opción en la vida es comerse al gato y, luego, morirse de hambre.
El gato se inventa que el hijo pequeño del molinero es un inexistente aristócrata, el Marqués de Carabás. A partir de ahí, logra el favor del Rey. Le roba mediante engaños a un terrible ogro sus tierras. Cuando éste acaba convertido en ratón, después de que el gato le engañe, éste se lo come. Las tierras se convierten en los dominios del inexistente Marqués de Carabás. El hijo pequeño del molinero se casa con la Princesa. El gato demuestra tener una gran habilidad. Es astuto. Es inteligente.
Lo malo es que el falso Marqués no le cuenta la verdad a su mujer. Nunca sabremos si la Princesa llega a enterarse de que su marido no pertenece a la aristocracia. Que todo ha sido un engaño. Y que sólo es el tercer hijo de un pobre molinero. Pero eso no debe de arruinarnos el cuento con final feliz.
Los gatos son muy maltratados en los dibujos de la Warner Bros. Por ejemplo, en los cortos de Speedy Gonzales, Silvestre siempre termina siendo humillado por Speedy. Se le demuestra como un inútil al que es fácil de engañar. No es un verdadero gato.
No es inteligente. No es nada.

 El hijo pequeño del molinero se casa con la Princesa. El gato hace las veces de testigo en la historia. El autor original de este cuento es Charles Perrault. Es, posiblemente, el cuento con menos moralina que jamás ha escrito el escritor francés.

Hace diez años que terminé el Ciclo de Grado Medio de Gestión Administrativa. Una vez, cuando me entregaron las notas en Navidad, me encontré camino del Instituto a cuatro gatos. No es una frase hecha. ¡Vi cuatro gatos!
Estudié el Ciclo de Grado Medio de Gestión Administrativa en el Instituto Sierra Minera. En ese instituto se puede estudiar Formación Profesional. Además de la E.S.O y de Bachiller. Pero volvamos al tema.
¡Aprobé con buenas notas todas las asignaturas! Yo me había pasado todas las noches estudiando desde hacía un mes. Me quedaba estudiando hasta las dos de la madrugada y me despertaba a las cinco para seguir estudiando.
Sin embargo, pensé que los gatos me habían dado buena suerte. Me ponía muy nerviosa en los exámenes.
Tenía miedo de haber respondido mal en más preguntas de lo indicado. Tenía mucho miedo de suspender todas las asignaturas.
Durante el tiempo que duró el Ciclo, me encontré con un gatito pequeño. Debía de tener menos de dos semanas de vida. Le cogí mucho cariño.
Me detenía camino del instituto para intentar cogerle en brazos. Para acariciarle. Pero él se resistía. No quería hacerle daño. Debieron de haberle matado a su madre. Le tenía miedo a la gente.
Le llevaba con frecuencia leche. Un día, desapareció sin más. Quiero pensar que alguien con buen corazón le adoptó.
Mi serie favorita cuando era pequeña era Isidoro. Luego, vino Billy El Gato. Esa serie la vi cuando era un poco más mayor.
Recuerdo que era la historia de un niño que maltrataba a los animales y que acabó convertido en gato. Sus recuerdos como humano le permitían sobrevivir como animal.
Pero, al mismo tiempo, aprendía a querer a los animales. Tenía a su alrededor a otros gatos que le servían de guía, pero había otros gatos que eran sus enemigos.
Canal Plus la emitió en abierto. Entre medias, me enganché a Garfield. 
Posiblemente, es el gato más humanizado que jamás he visto. Un gato que tenía muchos defectos humanos.
Los gatos son la mascota oficial de mi blog. Están en el lateral derecho.
No pienso quitarlos de ahí. De algún modo, están presentes en mi vida.
Otro día, quiero seguir hablando de los gatos. Son animales con mucha historia. En Egipto, hasta fueron adorados como dioses.
Pero eso será otro día.


En un blog dedicado al romanticismo, no puede faltar esta imagen. Dos gatos enamorados...

sábado, 8 de agosto de 2015

LA BIBLIOTECA

Hola a todos.
Hoy, me gustaría hablaros acerca del que es mi lugar favorito.
Se trata de la biblioteca. Desde niña, siempre ha sido mi lugar favorito. En mi colegio, teníamos una biblioteca. Se creó con los libros que los alumnos donaban gratuitamente. Me encantaba pasarme las horas muertas allí. Leyendo. Era un lugar donde sentía que nadie podía hacerme daño. Al leer, sentía que me iba a otro mundo.
A un lugar donde nadie se metería conmigo. Donde podía ser yo misma. Donde podía ser realmente feliz.
No exagero. Escribir y leer me salvaron la vida cuando más desesperada estaba. En realidad, nuestra biblioteca era una clase vacía. Le pusieron estantes.
Y llenaron esos estantes de libros. Había libros tanto de infantil como de juvenil. Y yo los leía. Quería empaparme de ellos. Disfrutar con sus líneas. Sentirme feliz.
Luego, nos cambiaron a todos de colegio. Se construyó un nuevo colegio en las afueras de la ciudad.
Y también él tenía biblioteca. Pasaba los recreos metida allí dentro.
No sé si lo que hice fue nocivo para mí. Pero aquellos momentos fueron los más felices de mi vida.
Leí allí versiones resumidas y muy infantiles de novelas que se quedaron grabadas a fuego en mi cabeza. Quo Vadis...Fabiola...Los últimos días de Pompeya...Mujercitas...Hombrecitos...Una muchacha anticuada...
También había libros de misterio. Pero esos libros no me interesaban.
Prefería otra clase de lecturas. Luego, empecé a ir al instituto. Y también allí había una biblioteca. Gracias a eso, pude leerme una de mis sagas favoritas. Los Hijos de la Tierra...Ya sé que Jondalar y Ayla son como Gary Stu y Mary Sue, pero en la Edad de Bronce. Sin embargo, eran novelas que me ayudaban a creer que podía encontrar el verdadero amor. Y es que no he conocido a una pareja más enamorada ni más apasionada que la formada por ellos dos. Ayla y Jondalar...

 Nuestra pareja favorita...Ayla y Jondalar...He encontrado este dibujo navegando por Internet. Un romance en la Prehistoria...

Sobra decir que tengo casi todos los libros de la saga, que son seis novelas. Me falta por leer la última de ellas. Todavía no lo he hecho.
En mi ciudad, hay una biblioteca. Está cerrada durante la temporada estival. Me hice socia de ella. Es uno de mis lugares favoritos. Suelo ir allí a leer. Me gusta ir allí a escribir. Y también consulto allí en el ordenador, que tiene conexión a Internet y te permiten conectarte allí gratis. Hace algún tiempo que no voy por allí. Es una buena costumbre que me da miedo perder. Es mi lugar favorito desde siempre y quiero que sea así.
No hay nada mejor que una biblioteca para leer y escribir.

viernes, 7 de agosto de 2015

HISTORIA DE UNA BLOGUERA

Hola a todos.
Han pasado ya cinco años desde que descubrí Blogger. ¿Cinco años? Mi blog "Un blog de época" no tiene ni cuatro años de vida. Los cumple en el mes de noviembre. ¿Cómo es posible? Es una historia bastante larga.
Hace cinco años, creé mi primer blog, que llamé "Romántica Lilith". No tiene nada que ver con el blog que tengo creado en esta cuenta. Lo creé en una cuenta diferente. Hace ya cinco años que no entro en ese blog. Y no es porque yo no quiera entrar. ¡Sí quiero entrar!
El problema es que olvidé mi contraseña. Y, para colmo de males, olvidé también la cuenta con la que lo creé. No recuerdo si apunté ambas cosas. No lo sé. Lo único que sé es que está cerrado. Pero Blogger no lo ha eliminado.
También creé otro blog en esa misma cuenta que olvidé. Se llamaba "Estrella Marina". Tampoco tiene nada que ver con mi blog actual "Estrella Marina". Ahí, estoy subiendo mis fanfics de Olivia y Jai. Pero ese blog, por desgracia, no tiene ninguna entrada. No lo inauguré de forma oficial. No hice nada en él. Está vacío y cerrado.
Meses después, creé otro blog. Lo llamé "El blog de una chica del siglo XIX". Tampoco tiene nada que ver con el blog del mismo nombre que tengo en esta cuenta.
Hice tan sólo una entrada en él. Después, no pude volver a acceder a él.
Lo había creado en una cuenta distinta. Sin embargo, olvidé la cuenta. Y también olvidé la contraseña. Lo tengo con esa única entrada muerto de risa. Lo triste de todo es que me gustaría volver a entrar en ellos. Poder darles vida.
Eso ocurrió en el mes de enero del año 2011. Entre ese mes y el mes de septiembre de ese año, creé otro blog. Es el blog que conocéis actualmente como "El blog de lady Parthenia Westland". Con este blog, me ocurrió un suceso lamentable. Pude acceder a él. Accedí a él por casualidad. Al querer acceder a este blog. ¡Pero me había olvidado por completo de él! Sí, por un casual, recordaba tanto la cuenta con la que lo creé como la contraseña. ¡Pero no me acordaba de él! Me quedé muerta cuando lo vi. Y, por casualidad, creé otro blog. Bueno, no fue casualidad lo que me llevó a crearlo. Fue el blog que albergó mi blog novela "Una brisa suave". Esta blog novela está terminada y el blog está cerrado. Pero se puede leer en la blogsfera. Disfruté mucho creándola.
Luego, creé el blog que albergó uno de los proyectos a los que más cariño le tengo, "Berkley Manor". No supe qué hacer con él durante algún tiempo. En la actualidad, todavía está activo. Y, finalmente, llegamos al mes de noviembre.
Fue en esos días cuando creé este blog. Tras unas semanas inactivo, decidí darle una oportunidad. Se convirtió en mi blog principal. "Un blog de época"...
Ha pasado bastante tiempo desde entonces. He aprendido a no tener tan olvidados mis blogs. Los he llegado a reconocer como seres vivos.
Por ese motivo, me duele no poder acceder a los tres blogs que tengo sin poder hacer nada con ellos. ¡Ni siquiera puedo eliminarlos! Es muy triste.
Todavía me queda mucho por aprender en este mundo de Blogger. Y sé que cometeré todavía muchos errores. Sólo espero decir algún día que he aprendido de ellos. Me gustaría poder acceder a mis blogs. Darles la vida que merecen tener.

jueves, 6 de agosto de 2015

LA VIDA SIGUE

Hola a todos.
El verano está transcurriendo un poquito mejor de lo que yo pensaba. Siempre que llega el verano, me pongo en plan catastrofista. Pienso que va a ocurrir alguna desgracia. Soy pesimista por naturaleza.
Duermo bien. Dentro del calor sofocante que hace noche sí y noche también.
Escribo cuando las Musas me rondan. No pienso forzar la máquina. Con alguna que otra frecuencia, salgo a la calle a dar un paseo. No voy a la playa. Este año, no sé lo que es todavía bañarme en el mar. Y, a decir verdad, no me importa mucho.
He vuelto a Facebook, que lo tenía muy olvidado. No quiero que me pase lo que me pasó la otra vez. Ingresé en Facebook, pero lo dejé ahí. Era como tener un blog y no hacer nada con él. Un defecto que espero ir corrigiendo con el paso del tiempo.
Como podéis ver, el blog está otra vez lleno de vida y hago entradas con más frecuencia.
Me hice el firme propósito de escribir a mano. Pero no sé cuándo lo haré. Por las noches, solemos acostarnos sobre las diez y media.
Puede que mi vida pueda parecer rutinaria. No me gusta nada salirme de la rutina.
Es bueno probar cosas nuevas. Aunque pueda parecer que las cosas nuevas traen consigo sobresaltos.
Es lógico que alguien piense que estoy exagerando. Es divertido hacer algo nuevo y diferente. Soy una persona muy precavida. Pienso las cosas dos veces antes de hacerlas.
Me acobardo. Sí, soy una cobarde. Me da miedo todo. Me da miedo hacer algo por temor a fracasar. Me ha ocurrido desde siempre. Me he sentido incapaz de hacer cosas que, en el fondo, sabía que podía hacer.
Y vuelvo a pensar en mi profe de Gimnasia. Me acuerdo de ti, Gabriel. Tú me decías que no existía ningún imposible. Incluso, me animaste a hacer el pino. Decías que no existen límites para las cosas.
Lo he dicho antes. Todos, en el fondo, tenemos un límite para hacer algo. Y creo que mi límite es escaso. Pude hacer el pino. No creo que pueda volver a hacer el pino nunca más. Fue una experiencia inolvidable. La rutina llama a la rutina. De algún modo, es como entrar en una especie de círculo. No quieres salir de allí.
Quieres que tu vida siga su curso. Que no se altere nunca. Que todo siga igual.
No quiero que nada altere mi rutina. ¿Se puede vivir en la monotonía?
¿Te puedes llegar a cansar? Hacer siempre lo mismo.
Sí...Te puedes llegar a cansar. Quieres desear hacer otra cosa. Algo distinto...Algo diferente...
Eso no me ha pasado.
Por ahora...¿Y si llega a pasarme?
A veces, desearía que las cosas nunca cambiaran. Quedarme tal y como estoy. Sin conocer el lado malo de la vida.
Aunque, por desgracia, he visto demasiadas veces ese lado. Sobre todo, cuando iba al colegio. No quiero acordarme de eso.
Por eso, quiero vivir así. De esta manera...
Aunque, en el fondo, no sea una vida. Sea algo así como estar metida dentro de un mausoleo. Mejor dicho, estar en el interior de un mausoleo, metida dentro de uno de sus nichos.



¿Es divertido ser monótono? No, no es nada divertido. Puede ser aburrido. Predecible...
¿Es divertido salir de la monotonía? Eso depende de lo que te haga salir de ella.
Pueden ser muchas cosas. Depende de muchos factores. Puede ser una experiencia divertida. Única... Inolvidable...
Pero también puede ser algo que te destroce la vida.
No sabemos lo que nos depara el mañana. No sabemos cómo serán nuestras vidas dentro de diez años. ¿Estoy contenta con ser tan monótona?
No lo sé. A veces, pienso que no me gusta ser así. Otras veces, deseo quedarme tal y como estoy. Lo he dicho antes. Es como estar dentro de un círculo. No quieres salir de él. O no puede salir de él. Estás metida ahí dentro. Sin saber qué hacer.
No sé qué hacer.

miércoles, 5 de agosto de 2015

CARTAS A BIBI

Hola a todos.
Hoy, os traigo una nueva carta que Jorge le escribe a Bibi. Son bastantes las cartas que este joven enamorado le escribe a su novia.
Veamos qué le escribe en esta ocasión.

                                Mi adorada Bibi:

                               Tu hermano Pedrito se ha empeñado en pasar toda la tarde conmigo. Lo cierto es que es fácil cogerle cariño. Soy hijo único. A veces, quiero pensar que Pedrito es como mi hermano menor. Y, de algún modo, estar cerca de él es como estar cerca de ti.
                                 Hemos pasado la tarde los dos solos.
-¡Butragueño es el mejor de todo El Madrid!-exclamó Pedrito-Gracias a él, ganará El Madrid la Liga este año.
-Todavía falta mucho tiempo-le recordé.
-Michel también es un buen jugador. Debuta este domingo con el primer equipo. ¡Mi madre me ha dicho que lo podré ver! Creo que La 1 lo retransmite. Si no es así, lo escucharé por la radio.
-Sabes mucho del Madrid.
                              Pedrito se echó a reír.
-Mi padre era del Madrid-me contó-No llegué a conocerle porque murió antes de que yo naciera. Pero he visto fotos suyas. Aparece con mi madre. En otra foto, aparece con Bibi cuando era un bebé. Ella sí se acuerda de él y me cuenta cosas. Me enseña fotos suyas. Incluso, me enseñó un álbum de cromos de jugadores de fútbol. Con Di Stefano...Mi abuelo...Los dos...Uno era de la Pontevedrina. Creo. Y el otro es del Celta de Vigo.
-Podrías ser un buen futbolista-opiné-¿No lo has pensado?
                             Pedrito se encogió de hombros.



                               Le revolví el pelo.
                              Vimos pasar a dos palomas torcaces. Recordé cuando se soltó una pareja de estas palomas, macho y hembra, en la isla.
                              Tú estabas allí con tu madre y con Pedrito. Contemplasteis la suelta.
                              Las palomas torcaces han criado en Toralla. Espero que a ningún loco le dé por cazarlas. Sería una pena perderlas.
                              Me he acostumbrado a verlas pasar.
                              Pedrito y yo hemos pasado toda la tarde en el bosque. Todavía faltan unas horas para que anochezca.
                              Es el momento en el que los estorninos regresan a sus hogares. Han hecho sus nidos en los árboles del bosquecillo que hay al lado de la urbanización. Una urbanización pegada a un pequeño bosque...¡Qué curioso!
-¡Ojala no talen los árboles!-exclamó Pedrito.
                           Si talan los árboles, los estorninos se marcharán a otro lugar. Pedrito me contó que él podía impedir que eso ocurriera.
-¿Y cómo lo piensas hacer?-le pregunté.
                          Entonces, me contó que había tenido una idea al recordar una película que fuisteis a ver los tres (Pedrito, vuestra madre y tú) al cine. Se llama La Guerra de los Niños. 
                       Pedrito no recordaba muy bien de qué iba. Pero sabía que había un empresario dispuesto a talar un bosque. Y había unos niños que querían impedirlo. Uno de los niños se subió a uno de los árboles.
                        Desde allí, podía vigilar el avance de las máquinas que talan árboles. Y dar aviso a sus amigos.
                         El niño que se subía era el hijo del tipo que quería talar todo el bosque. Pensaba que, si le veían subido a uno de los árboles, se marcharían.
                          Pedrito me contó que el plan tuvo éxito. Al final, no talaron el bosque.
-No talaron el bosque porque el niño se cayó del árbol y casi se mata y el padre dijo que no lo talaría si despertaba-le recordé-Cosa que ocurrió al final.
                         Pedrito tuvo que darme la razón. También he visto esa película.
                         Él recordaba la película porque salía un grupo formado por niños. A mí todos esos grupos me parecen iguales.
-¡Porque no entiendes de música!-se rió Pedrito.
                          Yo entiendo de buena música. Escucho a Barón Rojo. Una buena canción es la que te llega al corazón.
                            ¡Una buena canción es Los rockeros van al Infierno! Se la canté a tu hermano. Pedrito se me quedó mirando con cara rara. Creo que es un poco joven para que conozca a los Barón Rojo. 
-¿Y qué me dices de Leño?-le preguntó-¿Has escuchado Maneras de vivir? ¡Es una pasada!
-No...-respondió Pedrito-No...
-¡Pues no sabes lo que te estás perdiendo!
                          Pedrito me comentó que lloraste como una magdalena cuando escuchaste en el Telediario que Eduardo Benavente había muerto. Te gustaba mucho ese cantante. Todavía hay pósters suyos decorando las paredes de tu habitación.
                           Alabo tus gustos, mi querida Bibi. Se perdió a un gran músico y a un gran cantante en la carretera.



-Deberías de ver más Tocata-le aconsejé a tu hermano-O, mejor, ve La Edad de Oro. 
-Bibi ve ambos programas-me contó Pedrito-Pero le gusta más La Edad de Oro. A nuestra madre, en cambio, no le gusta mucho. Dice que sólo salen ahí pintas, como ella les llama. No lo creo. ¡Mola mucho cómo visten! Pero no creo que mi madre me deje vestir así.
-Ambos programas son buenos. Cada uno en su estilo...
-¿Me prestarás algún LP de los grupos que me has mencionado?
-¡Por supuesto, colega! ¡Somos familia! ¿O no?
                                Esta noche, nos hemos encontrado en el bosque, Bibi.
                                Te he contado lo que hemos hecho Pedrito y yo esta tarde.
-¿Es que piensas convertir a mi hermano en tu calcomanía?-te reíste.
-Tan sólo quiero que escuche música que mole-te contesté, también entre risas.
-No creo que a nuestra madre le agrade ver a Pedrito con una melena. ¡Se moriría del susto!
                               Empezamos a besarnos con desenfreno en los labios tras caer sobre el suelo. No dejemos de besarnos en ningún momento. Ni siquiera dejamos de besarnos cuando estábamos ya desnudos.
                               Ni siquiera cuando mi lengua comenzó a pasearse por uno de tus pechos para saborearlo con deleite.